Es tan solo un diario.

lunes, 22 de febrero de 2010

La quinta cicatriz es el quinto pecado capital.

Ayer practiqué el self injury (woow, que novedad). Por cada persona que me lastimó sentimentalmente, me hice un corte. Fueron cuatro hermosas rayas rojas en la pierna. Entonces mi subconciente gritó la palabra GULA. Ustedes pensarán: ¿Por qué?. Yo sé la respuesta.

Ayer, en facebook, una amiga publicó:

Recuerdo que la primera vez que leí eso quedé shockeada. Sin decir nada. Mi mamá, que estaba al lado mío me preguntó qué me pasaba. Quedé paralizada. Cuando reaccioné, con una risa inventada respondí: Mi amiga X tiene novio!. Fue una buena excusa. No me preguntó nada más. Corrí, corrí, corrí hasta mi cuarto. Tomé a mi vieja amiga 'Lilly' (así nombré a la hoja metálica de mi sacapuntas). Y pensé: GULA, el peor de los pecados. Fue tanta la fuerza con la que me corté que por un instante tuve el bobo pensamiento de que iba a morir desangrada. Es una cicatriz enorme, la más grande que me hice. Se llama Gula, y pasó a ser parte de mi piel.

[Me da escalofrios decirlo, pero acabo de buscar en la red y la Gula es el quinto pecado capital. NO existen las coincidencias.]

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La vida es una caja de sorpresas.
Mom and daddy look I'ts your little girl diyng for perfection.